He aquí el último y más ambicioso corto que he tenido el placer de hacer con mi colega Enrique Carnicero hasta el momento.
¡Ha pasado ya un año desde que lo terminamos! Qué rápido pasa el tiempo, madre mía. A nivel de sonido tiene sus carencias, pero la verdad es que me lo pasé en grande y aprendí un montón con este proyecto. Hoy en día lo haría todo de una forma completamente distinta. La edición de los diálogos fue directamente una experiencia traumática...
Pronto más y mejor, que ya hay cosas en marcha ;)